Una encantadora pieza de cerámica esmaltada en blanco y negro, realizada en los reconocidos alfares de Hispania CH, en Manises, como queda acreditado por el sello en la base. Este gatito, capturado en una pose relajada pero con su cabeza erguida en actitud alerta, evoca una sutil mezcla de serenidad y atención, típica de estos animales tan queridos.
Fabricado en la década de 1960, su excelente estado de conservación lo convierte en un tesoro tanto para coleccionistas como para quienes buscan una pieza única con historia. Su diseño minucioso y realista lo hace ideal como elemento decorativo en cualquier espacio, aportando un toque de nostalgia y elegancia.
Medidas: Largo 40 cm, alto 25 cm, ancho 20 cm.
Un verdadero homenaje a la maestría artesanal de Manises.
